Puede que las joyas de plata se vean bastante fáciles de usar, sin embargo hay unos pequeños consejos que deberías tomar en cuenta a la hora de lucir una joya de plata.
Los antiguos egipcios, los persas, los romanos y hasta los incas le tenían gran afecto a la plata y para todos ellos era sinónimo de pureza, belleza y nobleza.
Las joyas más antiguas datan del 3000 a.C. lo que significa que la humanidad lleva más de 5000 años apreciando la plata como un ornamento de belleza y buen gusto.
Existe una joya para cada ocasión y ciertas claves si no queremos caer en los excesos. Lo importante es saber que las joyas deben funcionar en torno al atuendo y que este último debe acoplarse a la situación.
1.- Usa lo que a ti te guste
Todas tenemos una joya de plata básica que no puede faltar en nuestra rutina, sea que la hayamos comprado o heredado. Muchas veces esa prenda son unos pendientes de plata, lo que es una muy buena noticia en todo caso. Se pueden llevar pendientes con outfit casuales y con outfit elegantes. Ahora, debes tener cuidado de no pecar de sencilles porque hay vestidos que exigen prendas mucho más grandes y llamativas, pero de eso ya te hablare mas adelante.
2.- Si quieres que la joyería sea lo que más resalte
¿Qué quieres que destaque? ¿Tu vestido o las joyas? Aunque generalmente buscamos que las joyas se adapten al vestuario, existen excepciones, sobre todo en noches y eventos de gala, donde lo que queremos hacer destacar son las joyas y dejar que el vestido o el atuendo que llevemos pase a un segundo plano, ¡pero ten cuidado de no excederte! Si quieres hacer que tu joyería destaque a más no poder, busca un vestido directo, de un solo color (negro, rojo beige), sin pedrería, vuelos, flecos o cortes extravagantes.
3.- Si quieres que la joyería complemente el atuendo
Sobre todo en cenas y noches de gala, existen vestidos llamativos que hablan por sí solos. Con esto nos referimos a esos vestidos de colores brillantes, con cortes extravagantes y repletos de pedrería. Cuando un vestido es así agregarle más es demasiado y lo que queremos es deslumbrar, no dejar ciegos a nuestros admiradores con tanto brillo. Cuando un vestido es muy extravagante no debes siquiera pensar en acompañarlo con aretes enormes, collares, pulseras y anillos. Más bien, sin prejuicios, inclínate por los sencillos pero elegantes pendientes, o por sencillisimas pulseritas de plata.
4.- En que momento se debe llevar una sola pieza
Existen casos en los que es necesario llevar una sola pieza y no un juego de joyería. Recordemos que estamos en pleno siglo XXI, la vida urbana es muy movida, dinámica y mucho más entusiasta; no es como que si a diario asistiéramos a una coronación en la época medieval. Entonces ¿por qué llevar 5 piezas de plata en un solo atuendo? Sí y solo sí es aceptable cuando las piezas son lo suficientemente sencillas y ninguna predomina sobre la otra, es decir, cuando son joyas muy discretas. ¿Cuándo se debe llevar una sola pieza? Cuando esa pieza es lo suficientemente llamativa como para acaparar todo el protagonismo.
5.- Qué llevar en nuestra vida diaria
Sin duda, los mejores acompañantes en la vida cotidiana, cuando no tenemos una gala o una cena importante, son los colgantes de plata. Al igual que los pendientes, los colgantes de plata son el tipo de joyería que podemos llevar a todos lados sin que desentone.